¿Es la piscina segura para sus dientes?

Esta temporada de verano, decenas de miles de personas estarán disfrutando de un descanso en las piscinas, ya sea en un resort, en la piscina pùblica, o hasta en la comodidad de su hogar. Estas piscinas podrían poner la salud dental de su familia en riesgo de daños permanentes a sus dientes.

Erosiòn dental

Casi nunca pensamos que podría estar causando un daño significativo a nuestro cuerpos. Sin embargo, como pacientes debemos de pensar en algo más que el pelo verde o la picadura ojos de cloro también debemos de pensar en la erosión dental.




La sensibilidad dental causado por el cloro es muy común. El mantenimiento inadecuado de la misma puede provocar efectos dañinos en los dientes. Un artículo publicado por New york university del año pasado sugiere que, dado que los servicios profesionales de limpieza de la piscina puede costar miles al año, los propietarios han asumido la responsabilidad de dar rienda suelta a los productos químicos en sus propias piscinas para ahorrar dinero.

El equilibrio del pH del agua tratada con cloro debe ser comprobado al menos una vez por semana, lo que la mayoría de los propietarios no son conscientes de, poniéndolos en riesgo de rápido deterioro del esmalte. El nivel de pH adecuado para el agua de la piscina se lee en alguna parte entre 7,2 y 7,8.

Según un artículo publicado por la Academia de Odontología General, los nadadores que están en el agua durante seis horas o más por semana corren el riesgo de manchas amarillas o marrones se forman en los dientes. Los antimicrobianos que se encuentran en agua de la piscina tienen un pH mucho más alto que nuestra saliva, lo que provoca que las proteínas se descomponen y hace que los depósitos para formar descoloridos.

Ya sea que sus pacientes son nadadores ávidos o simplemente les gusta darse un chapuzón de vez en cuando, para proteger sus dientes de la exposición al cloro es importante. La prevención puede ser tan simple como para informarles que conscientemente mantengan sus bocas cerradas, mientras que en la piscina o lo que sugiere una cita adicional dental en el inicio del verano por un tratamiento con flúor. En una nota positiva, el número de grupos que optan por una solución de cloro no se ha disparado y sigue creciendo, la prevención de la sensibilidad dental y la decoloración como resultado de la actividad recreativa.

Fuente: speareducation